CIUDAD DE MÉXICO (CNNExpansión.com) — Un monumento en honor al perro callejero fue erigido en la Ciudad de México, ciudad en la que viven 3 millones de animales sin dueño, según estimaciones de la Asociación Milagros Caninos.
La fundadora del organismo, Patricia España, comentó que el objetivo del monumento es crear mayor conciencia sobre el trato a esa especie. Refirió que más de un millón y medio de canes son abandonados en la calle y el resto, aun cuando tienen dueño, son expuestos a vejaciones de todo tipo.
Al acto a cargo de la asociación, asistieron decenas de personas que se congregaron con sus mascotas para apoyar la causa.
La obra de la escultora mexicana Girasol Botello es de bronce, pesa 80 kilogramos y mide 1.30 metros de altura. La figura que representa a un perro tuvo un costo de 130,000 pesos.
El Monumento al Perro Callejero se encuentra en la esquina de las calles Insurgentes y Moneda, en la colonia Tlalpan centro, en el Distrito Federal.
La fundadora del organismo, Patricia España, comentó que el objetivo del monumento es crear mayor conciencia sobre el trato a esa especie. Refirió que más de un millón y medio de canes son abandonados en la calle y el resto, aun cuando tienen dueño, son expuestos a vejaciones de todo tipo.
Al acto a cargo de la asociación, asistieron decenas de personas que se congregaron con sus mascotas para apoyar la causa.
La obra de la escultora mexicana Girasol Botello es de bronce, pesa 80 kilogramos y mide 1.30 metros de altura. La figura que representa a un perro tuvo un costo de 130,000 pesos.
El Monumento al Perro Callejero se encuentra en la esquina de las calles Insurgentes y Moneda, en la colonia Tlalpan centro, en el Distrito Federal.
Según los enterados, dicho monumento fue erigido para un partido político que tuvo un buen tiempo igual de fugas que el perro que logró satisfacer su hambre cuando al tragón de la esquina se le cayó la torta en el momento que dicho perro ‘pasaba despreocupadamente’ por el lugar, y que ahora se la viven peleando entre si por las migajas que logran arrebatar a sus contrarios. Son buenos perros de jauría que impiden el paso cuando se reunen.