Inger Enkvist es catedrática de español en la Universidad de Lund (Suecia) donde se ha dedicado al estudio de la cultura y la literatura latinoamericanas. Para ella, el desarrollo del continente americano tiene que venir de la mano del derecho y la instrucción de sus ciudadanos
“Los latinoamericanos están esperando a alguien que les salve. Quizá en las situaciones difíciles es más fácil pensar que no se puede hacer nada y esperar un milagro en vez de confiar en el trabajo diario. Los personajes que analizo en mi libro son proyectados a través de los medios de comunicación y escudan sus mensajes en la esperanza que ofrecen. Lo que es triste es que los pobres no tienen mucho margen y se agarran a sus palabras”.
“Los políticos latinoamericanos suelen decir que sus países son victimas inocentes y que los malos son los de fuera. Resaltan las maldades de Estados Unidos en sus discursos y obvian sus malas gestiones. Quizá lo que deberían hacer es ver si pueden copiar el modelo estadounidense para estar a su nivel de desarrollo o superarlos”.
Es una verdadera pena que personajes mediocres con tal de vender, y decirse eminencia de la psicología extranjera, de una opinión tan generalizada de un continente que habla más o menos el mismo idioma, pero no comparte la misma idiosincrasia, ya que cada país aunque estuvo en sus orígenes sojuzgado por el mismo continente, esto no ocurrió en el mismo momento, ni con el mismo tiempo, ni con las mismas características. Aquí mismo en México, la idiosincrasia del norteño y del sureño es mucho muy distinta, con más razón entre Costa Rica y Argentina, o cualquier otro país.
No debemos olvidar que toda cultura espera un salvador, un mecías. Pero esto no explica por si solo la supuesta inactividad de las personas, El problema radica en que los políticos nos quieren así, si fuéramos capaces de darnos cuenta de nuestra auto suficiencia, los políticos desaparecerían y a su ves el caos cenaría (por desgracia requerimos de los políticos), lo que necesitamos darnos cuenta es que debemos trabajar para nuestro bien y el de nuestra familia sin aprovecharnos desmedidamente de los que nos rodean, de esta forma si yo progreso, arrastro al progreso a los que me rodean y permito que el vecino progrese sin afectarlo y sin afectarme. Si envidias (ya lo se,,,,, sueño guajiro. Pero alcanzable).
Y por último, los héroes están muertos, lo que buscamos son LIDERES.
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